Hacer suficiente ejercicio es importante para todos y particularmente para las personas con diabetes. La actividad física puede mejorar la respuesta a la insulina muscular y permitir más glucosa en las células musculares, reduciendo los niveles de glucosa en la sangre. Ser más activo puede ayudar con el control general de la diabetes y promover la pérdida de peso y la salud cardiovascular. Otro beneficio de la actividad física es que aumenta los niveles de endorfinas “sentirse bien”, que se sabe reducen las percepciones de estrés y fatiga y aumentan el estado de ánimo. Levantarse del sofá no solo mejorará la salud, sino que también puede reducir la necesidad de medicamentos o insulina.
Se recomiendan al menos 150 minutos de actividad aeróbica, de intensidad moderada, por semana.
Algunos ejemplos incluyen:
- Andar en bicicleta — ¡intente ahorrar gasolina y súbase a su bicicleta rumbo al trabajo!
- Pruebe una excursión — intente un nuevo sendero este fin de semana.
- Baile — revise si en su vecindario ofrecen clases de baile, o baile alrededor de su casa.
- Clases de aerobics — puede tomar una clase en la mayoría de los gimnasios, o incluso en su centro local para personas mayores.
- Programas de ejercicio por televisión:
- La programación televisiva no funciona para usted, -grábelo.
- Existen excelentes opciones de bajo impacto como “Siéntate y mantente en forma” que le permiten hacer ejercicio desde la comodidad de una silla.
- Revise los DVD de ejercicios de su biblioteca local, ¡son gratis!
Controlar la diabetes puede ser frustrante, intentar incluir actividad física puede parecer desalentador; comience lentamente a hacer cambios graduales y se sentirá cada vez más cómodo.
Para obtener más información, consulte Diabetes: nutrición y salud: https://extension.colostate.edu/topic-areas/nutrition-food-safety-health/diabetes-nutrition-and-health-9-334/.
Consejo:
Antes de comenzar un programa de ejercicios, hable con su médico para aprender: cómo protegerse de la glucosa baja en la sangre.